¿Estás planeando una visita al Museo del Ferrocarril de Santander? Ven y descubre de primera mano su historia centenaria.
En el Museo del Ferrocarril de Santander se activará la imaginación de los más pequeños mientras se acercan a locomotoras a vapor, estaciones antiguas, o suben a bordo de estos gigantes de hierro que surcan Cantabria desde tiempos inmemoriales.
¿Cómo llegar al Museo Cántabro del Ferrocarril?
El Museo Cántabro del Ferrocarril se encuentra en las estaciones de Santander. Aunque está en pleno centro de Santander, es un gran desconocido para muchos que vivimos aquí, a pesar de la gran labor que realiza por mantener el legado histórico de nuestra región.
Para llegar, se accede por el enorme aparcamiento de las estaciones donde, si vas hasta el final, verás un cartel indicativo que te lleva al museo.
Tendrás que seguir las vías por una carretera estrecha hasta pasar bajo una pasarela que une la Calle Castilla con la Calle Alta.
El museo se encuentra en un taller antiguo de RENFE, y la dirección es Plaza Estaciones, 39002 Santander, Cantabria. El enlace de Google del acceso al Museo Cántabro del Ferrocarril es este.
Si quieres venir en transporte público, la estación de autobuses está en frente del Museo del Ferrocarril de Santander. Y cómo no, si quieres, podrás venir en tren 😎

Horarios de visita y precios del Museo Cántabro del Ferrocarril
Para visitar el Museo Cántabro del Ferrocarril hay que pedir cita previa en la Oficina de Turismo por teléfono al 942 203 000 / 942 203 001. También se puede hacer por correo electrónico al email turismo@santander.es
Las visitas son guiadas, y si se quieren hacer en grupo, se puede llamar directamente a ACAF. al teléfono móvil 669 999 944.

Las visitas al Museo Cántabro del Ferrocarril son siempre guiadas, y tienen una duración de 45 minutos y se hacen los martes y viernes de 19:00h a 21:00h, excepto si es festivo.
No es accesible para sillas de ruedas, pero se puede visitar con un carrito de bebé.
La visita al Museo Cántabro del Ferrocarril es gratuita, pero la Asociación Cántabra de Amigos del Ferrocarril suele pedir un donativo para que esta actividad tan chula siga teniendo continuidad.
La visita al museo
El Museo del Ferrocarril está sostenido y mantenido por los propios socios de la Asociación Cántabra de Amigos del Ferrocarril (ACAF), una Asociación sin ánimo de lucro, así como por los donativos de los visitantes al museo.
Esta Asociación intenta mostrar la influencia del ferrocarril en el desarrollo de Cantabria como región y en Santander. Se encargan ellos de mantener el museo, así como de seguir consiguiendo materiales a exponer.
Nos enseña la revolución que supuso su construcción a nivel industrial, cultural, educativo, incluso el cambio que supuso en hábitos como la alimentación, así como su valor histórico y patrimonial.
El museo está genial, te encuentras máquinas auténticas de nuestro pasado ferroviario y muchos objetos con mucho valor histórico y difíciles de ver en otro lugar.
Los voluntarios de la Asociación son muy amables y cercanos, explican y enseñan todo muy bien pudiendo hablar con ellos con total confianza.
Lo hacen con el esmero de las personas que sienten pasión por un tema. Te sientes muy a gusto en el Museo y te tratan muy bien. Es de este tipo de agrupaciones que te contagian la pasión por lo que hacen.
El recorrido comienza con la recreación del despacho de un jefe de estación, con elementos relacionados: máquinas expendedoras de billetes, paneles de control, báscula, material de oficina,…..

A continuación, en la segunda sala, encontramos lo que tal vez más llama la atención de los chicos y chicas: una maqueta escala H0 (1:87) de unos 20 m2, donde los socios pueden hacer circular y recrear antiguas composiciones de coches y locomotoras, que ya no podemos ver en la realidad.
También hay vitrinas con modelos a escala, trenes de juguete de latón de los años 30 y 40, maqueta escala N y modelos a escala 1:160
Se pasa después a la biblioteca y archivo, con vitrinas con gorras de servicio, uniformes, telégrafos Morse, dioramas y modelos.
Y finalmente se llega a las dos grandes naves donde se encuentra el material móvil real del patrimonio ferroviario del Museo: dos locomotoras de vapor, dos tractores ferroviarios, la mayor locomotora quitanieves de la península, una unidad eléctrica (que aún podemos disfrutar todos y todas), un remolque de tranvía, tres locomotoras mineras y dos locomotoras que prestaron servicio en Reocín.
Hay incluso un vagón en el que puedes entrar y sentarte. Tiene gracia que te dan billetes de los antiguos, y te los pican como hacían los revisores de antaño 😍

Fuera del edificio, pueden verse tolvas y vagonetas mineras y una apisonadora.
Hay que entender que este no es un Museo interactivo en el que los niños y niñas puedan experimentar con los elementos expositivos, por su valor histórico y patrimonial.
Se disfruta una experiencia compartida con sus padres y abuelos, rememorando momentos de su vida en los que pudieron disfrutar de otros tiempos del ferrocarril, como medio de transporte, comunicación y socialización.
La visita al Museo Cántabro del Ferrocarril en Santander es un plan ideal para ir con niños. Sobre todo en días de lluvia. Aquí tienes nuestros planes favoritos que hacer en Cantabria con niños cuando llueve.
Es un plan en familia imprescindible para todos los amantes del ferrocarril. Una iniciativa privada que nos muestra un reflejo de nuestra historia, y que debería recibir un mayor reconocimiento y apoyo públicos.
¿Se me ha olvidado algo? ¿Conocías el Museo del Ferrocarril de Santander? Deja tu opinión al final del artículo, nos ayuda a mejorar.
Y si te parece interesante, comparte esta experiencia tan chuli con tus amigos y amigas. Nos ayudará a conservar la memoria de una pieza clave en la historia de Cantabria.